"Podremos hacerlo, seremos capaces de lograr este resultado", dijo Pompeo al intervenir ante la Cámara de Representantes, comentando el encarcelamiento de Afridi.
A principios de mayo, el portavoz del Ministerio de Exteriores de Pakistán, Mohammad Faisal, declaró que su país no considera entregar a Afridi a EEUU.
Al comentar las informaciones de los medios de que Pakistán presuntamente está dispuesto a canjear a Afridi por Aafia Siddiqui, científica pakistaní que cumple condena en una cárcel de EEUU, el diplomático dijo que no está al tanto de semejante acuerdo.
El 30 de abril dos fuentes independientes cercanas al caso informaron a Sputnik que la CIA había preparado una operación para rescatar de la cárcel a Afridi pero el Servicio de Inteligencia pakistaní la había frustrado.
Una fuente informó también que EEUU ya había solicitado la extradición de Afridi, sin embargo Islamabad se negó a hacerlo y tampoco aceptó intercambiar a Afridi por Siddiqui.
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Poco después del operativo para eliminar a Bin Laden en mayo de 2011, la prensa estadounidense afirmó que en gran medida el éxito de los servicios de inteligencia se debió a Afridi, quien logró entrar en la casa de Bin Laden y bajo un falso pretexto de realizar un campaña de vacunación obtuvo muestras de ADN de los miembros de la familia del terrorista.
La operación de EEUU en Pakistán, realizada sin consentimiento de las autoridades locales, agravó seriamente las relaciones entre los dos países.
A finales de mayo de 2011 Afridi fue detenido por los organismos de inteligencia militar de Pakistán acusado de traición.
Un año después fue condenado a 33 años de prisión por supuesta relación con el grupo armado Lashkar-e-Islam (actualmente Yeish al Islam), posteriormente la sentencia fue reducida hasta 23 años.
Pese a que EEUU intentó lograr la liberación de Afridi, todavía sigue condenado.
