Trabajadores de Washington no podían ir al baño por las sanciones antirrusas

Las últimas sanciones que la Administración Trump ha impuesto sobre toda una lista de multimillonarios rusos han influido hasta en los baños del National Mall de Washington, ubicado frente al Capitolio. Ahora, estos se han quedado sin las bombas de aguas residuales necesarias para que funcionen, según publica The Huffington Post.

En concreto, se trata de las sanciones que afectan al ruso Víktor Vekselberg, propietario del Grupo Renova, una empresa de inversiones especializada en metales, energía y productos químicos. Hasta hace poco, el grupo tenía una participación mayoritaria en Sulzer, una compañía industrial suiza que se especializa en equipos de bombeo, motivo por el que la empresa se ha visto envuelta en las sanciones contra Rusia.

The Huffington Post asegura que ahora se está intentando encontrar un nuevo distribuidor que provea al National Mall de las bombas necesarias. Las que hasta ahora se habían utilizado se reemplazaron en el verano de 2017, pero se estropearon en marzo de 2018 y eso hizo que los baños estuvieran fuera de servicio. Los empleados públicos tuvieron que utilizar baños portátiles y los de los edificios cercanos, según ha revelado al periódico Mike Litterst, un portavoz de National Park Services, la empresa que provee de los servicios públicos necesarios a todos los parques y monumentos nacionales de Estados Unidos.

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Para hacerse con las bombas, National Park Service había contratado a la empresa Chesapeake Environmental Equipment, que a la vez distribuye los productos de Sulzer.

Tras enterarse de las acciones del Departamento del Tesoro contra Vekselberg, el director general de Sulzer, Gregoire Poux-Guillaume, "entró en 'modo crisis'" con el fin de elaborar un plan para limitar el impacto de esas sanciones en las operaciones de la compañía en Estados Unidos, publica a su vez Bloomberg.

Sulzer anunció el 12 de abril que había adquirido cinco millones en acciones del Grupo Renova para hacer de Renova un accionista minoritario, liberando así a Sulzer de las sanciones. La empresa suiza dijo en ese momento que sus actividades "se habían visto afectadas considerablemente", pero que no creía que ello "fuese a afectar su rendimiento a largo plazo".

Christopher Scott, uno de los abogados de Sulzer, dijo que, si bien las sanciones habían congelado temporalmente los activos de la compañía en Estados Unidos, no sabría decir en qué medida habían afectado a Chesapeake Environmental Equipment. El contrato de la empresa de servicios públicos con Chesapeake está fechado el 19 de marzo, aproximadamente tres semanas antes de que Sulzer cayera en la lista de sanciones.

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Por lo tanto, si bien es probable que las sanciones no fueran la única razón de la demora, parece que han retrasado aún más la reparación de los inodoros en el edificio del servicio de parques. Los inodoros del edificio de la sede central volvieron a funcionar de nuevo el 20 de abril y los inodoros portátiles se retiraron el 9 de mayo.

El 6 de abril, EEUU impuso sanciones a 38 individuos y entidades rusas por su supuesta interferencia en Ucrania y la intromisión en las elecciones en Occidente, así como por la presunta actividad cibernética maliciosa y su apoyo al Gobierno sirio.

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