El contrato, por valor de 26,3 millones de dólares, prevé que el láser pase a formar parte de las armas de los cazas estadounidenses a partir del 2021. El proyecto se enmarca en el programa militar estadounidense que prevé el desarrollo de armas láser defensivas para sus cazas, conocido como SHiELD.
"Conseguir crear un láser tan pequeño que quepa en un caza es un reto totalmente nuevo (…) El desarrollo de láseres de alta intensidad (…) demuestra que la tecnología que hace posible este tipo de armas láser es una realidad", dicen desde Lockheed Martin.
En otoño del 2016, China también equipó un camión militar convencional con un cañón láser de 30kW, suficiente para destruir aviones y helicópteros.
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