El presidente Trump ha creado una comisión para desarrollar nuevas armas nucleares de bajo rendimiento para su uso en campos de batalla, informó el medio 'Politico'. Helen Mary Caldicott, una de las activistas más conocidas del movimiento antinuclear, calificó la idea de una 'guerra nuclear limitada' como "descabellada".
"Por supuesto, todo el mundo sabe que una vez que se aplique un arma nuclear, se podría desencadenar una guerra nuclear global. Así que este tipo de pensamiento es clínicamente descabellado", enfatizó.
'Politico' señaló que la revisión del programa de bombas nucleares de bajo rendimiento tenía como objetivo "disuadir a Rusia, Corea del Norte y otros posibles adversarios nucleares".
Asimismo, la activista advirtió que si Estados Unidos continúa promoviendo nuevas armas nucleares tácticas, otras potencias nucleares seguramente seguirán su ejemplo.
"EEUU es el modelo para todos los demás países del mundo y lo que esta potencia hace en su política de armas nucleares será seguramente imitado por otras naciones equipadas con instalaciones para fabricar armas nucleares, lo que hace más probable la guerra nuclear", puntualizó Caldicott, quien describió la política de disuasión nuclear como "una política de locura nuclear".
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"El hecho de que todavía no nos hayamos extinguido con armas nucleares es una cuestión de pura suerte, pero teniendo en cuenta la situación política actual, con líderes políticos inestables que se amenazan con armas nucleares, creo que estamos más cerca que nunca de la aniquilación nuclear", concluyó Caldicott.
