"Como resultado de la determinación afirmativa de la Comisión, se mantendrá el actual acuerdo de suspensión", señala el texto.
La Comisión concluyó que "llevar a término la investigación suspendida sobre prácticas de comercio desleal relacionadas con el uranio de Rusia podría derivar en una continuación o reaparición de un daño material en un tiempo razonablemente previsible".
La investigación había sido suspendida luego de tres periodos previos de análisis públicos iniciados en 1992.
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