Quienes censuran la respuesta de Trump a los sucesos de Charlottesville (60%) también representan el doble en comparación con los que aprueban su comportamiento (32%).
"Elegido por ser un fuerte negociador y visto ahora mayoritariamente como una persona que divide, el presidente Donald Trump suscita un fuerte rechazo por su gestión y tiene cotas bajas en lo que se refiere al tratamiento de problemas raciales", constata el director ajunto del estudio realizado por la Universidad Quinnipiac, Tim Malloy.
El 63% de los entrevistados desaprueba la manera presidencial de tratar las relaciones interraciales, frente al 31%s de los que están satisfechos con su labor en este ámbito.
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La movilización degeneró en choques con los manifestantes de izquierda que les hicieron frente y terminó con la embestida de un automóvil contra los manifestantes contrarios a la derecha, lo que provocó la muerte de una mujer y dejó heridas a una veintena de personas.
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La cifra total de heridos y lesionados en los enfrentamientos llegó a 34.
El presidente Donald Trump fue duramente criticado por la tibieza con que reaccionó en un principio a la manifestación de la ultraderecha en Charlottesville. Aunque finalmente emitió un comunicado condenando a esos sectores, al día siguiente se retractó y culpó a los dos bandos.
