"Funcionarios de la NSA y el FBI vieron el operativo de campo de los Juegos Olímpicos de Salt Lake City como una oportunidad de oro de juntar los recursos de ambas agencias para ensayar y perfeccionar una nueva escala de vigilancia masiva", afirmó Drake en una declaración que publica The Washington Post.
La declaración de Drake forma parte de una demanda presentada por el exalcalde de Salt Lake City Rocky Anderson ante la Corte del Distrito de Utah en nombre de seis ciudadanos de EEUU que alegaron que sus comunicaciones privadas fueron vigiladas y probablemente almacenadas por la NSA durante los Juegos de Salt Lake City.
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Las revelaciones de Drake contradicen la declaración del exdirector de la NSA Michael Hayden quien negó previamente la existencia del programa.
Por su parte, el actual director de operaciones de la agencia, Wayne Murphy, afirmó que los servicios de seguridad solo vigilaron en Salt Lake City las comunicaciones de los extranjeros y que al menos uno de los vigilados tenía vínculos con grupos terroristas.