"En la actualidad, no se nos ha ordenado dejar de realizar ninguna operación ni se nos ha ordenado detener ninguna planificación operativa", señaló Jacques.
El 7 de febrero, el New York Times informó que Yemen había retirado el permiso para que las fuerzas estadounidenses realizaran operaciones especiales dentro del país después de la operación del 29 de enero que provocó la muerte de civiles y un oficial del grupo especial SEAL (por sus siglas en inglés) de la Marina de los Estados Unidos.
Sin embargo, Jacques dijo a esta agencia que el Comando Central (CETCOM, por sus siglas en inglés) continuaría conduciendo operaciones en coordinación con el Gobierno de Yemen para diezmar, interrumpir y destruir Al Qaeda.
Yemen es escenario de violentos enfrentamientos desde 2014 entre los rebeldes hutíes del movimiento Ansar Alá y los partidarios del expresidente Alí Abdalá Saleh, por una parte, y las fuerzas leales al presidente legítimo Abdo Rabu Mansur Hadi, por otra.
Desde marzo de 2015 las fuerzas que luchan por el mandatario legítimo gozan del apoyo de una coalición de países del Golfo Pérsico y África del Norte liderada por Arabia Saudí.