"La elección de Donald Trump en Time destaca un liderazgo no convencional, que puede ser bueno o malo; es un reconocimiento realista por parte de la revista a la irrupción del estilo Trump, que está teniendo consecuencias en las redes de poder y en las decisiones políticas a nivel nacional e internacional", señaló el magíster en ciencia política.
La revista estadounidense Time nombró hoy al republicado Trump la Persona del Año 2016, ironizando con "el presidente de los Estados Divididos de América", por la fuerte pugna que desató su carrera presidencial y su victoria en las urnas entre los ciudadanos del país norteamericano.
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"Desde el punto de vista periodístico, lo que hizo Time es lo correcto, porque se toma en cuenta que Donald Trump rompió los moldes o las costumbres y eso lo instala como un centro de atención permanente", enfatizó el experto.
Holzmann, aseguró que el impacto que ha causado la entrada de Trump al mundo de la política, radica en el rompimiento del status quo del sistema de relaciones en este ámbito y el giro que ha dado al discurso político, generando una alerta a nivel mundial.
"La figura de Donald Trump ha tenido consecuencias tanto en Estados Unidos, con una sociedad dividida, como a nivel internacional, tomando en cuenta que los demás países se han volcado a mirar cómo va a actuar este nuevo presidente que rompe reglas y que pareciera ser que no dejará de hacerlo", agregó el académico de la Universidad Adolfo Ibáñez.
El analista político recordó la llamada telefónica entre el conservador y la mandataria de Taiwán, Tsai Ing-wen, cuya conversación "rompió" con décadas de diplomacia entre el gigante asiático y Estados Unidos, que en 1979 cerró relaciones diplomáticas con la Isla autónoma bajo la política de reconocimiento de "una sola China".
El artículo que Time publicó acerca de Trump, subraya que el empresario fue duramente criticado durante toda su vida pública, "pero los críticos nunca llegaron a entender que su desdén le hizo más fuerte", indicó el medio.
En 2015 la revista nombró a la canciller alemana, Ángela Merkel, como la persona más influyente del año, un año antes, en 2014, fueron galardonados los luchadores contra el ébola, y en 2013, en el papa Francisco, el primer pontífice latinoamericano que ocupó la Cátedra de San Pedro aquel mismo año.
