"Trump apoya la construcción del oleoducto en Dakota del Norte y revisará (el tema) cuando asuma el cargo", dijo el portavoz del equipo, Jason Miller, al ser consultado sobre el controvertido proyecto de la empresa Dakota Access para perforar por debajo del río Misuri, algo que recibe fuerte resistencia de la comunidad indígena sioux.
A pesar de esta decisión, representantes de la comunidad sioux de Standing Rock aseguran estar preocupados y anunciaron que permanecerán en su campamento, ya que la empresa encargada de la construcción, Energy Transfer Partners, emitió un comunicado el domingo declarando que "todavía está comprometida a que este proyecto vital sea completado".
El oleoducto, con una inversión prevista de 3.800 millones de dólares y una extensión de más de 1.875 kilómetros de longitud, prevé transportar 470.000 barriles diarios de petróleo desde Dakota del Norte hasta el estado de Illinois (noreste).
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El tendido ha destruido lugares sagrados para los indígenas y amenazado los cursos de agua de su territorio.
La perforación por debajo del lecho del río Misuri estaba planeada a menos de 1,5 kilómetros de los límites de la reserva indígena.
La comunidad de Standing Rock protesta desde abril.
