Varios expertos en seguridad y diversos oficiales han señalado que no recuerdan otros casos en la historia de la Policía estadounidense en los que se hubiera utilizado un robot para eliminar a un sospechoso o un criminal.
El método empleado para acabar con la vida de Johnson generó discusiones respecto al uso de este tipo de tecnologías con fines letales. Anteriormente, los robots se habían utilizado solamente para desactivar explosivos o realizar un monitoreo de situaciones críticas, pero nunca habían sido equipados con armas o bombas.
"Cuando no hay otros medios, yo pienso que la situación en Dallas es un buen ejemplo. Lo más importante es dar seguridad a las fuerzas policiales", apuntó el alcalde de Dallas, Mike Rawlings.
Por el momento, no todos los especialistas en seguridad y jurisprudencia están tan entusiasmados con esta idea.
"Si los robots letalmente armados se utilizan en situaciones de este tipo, ¿en qué otros casos podrían ser utilizados?", se pregunta la crítica con el método y profesora de la Universidad de California, Elizabeth Joh.
Los contrarios al uso de robots con fines letales advierten del riesgo asociado a la 'sencillez' de recurrir a una máquina para eliminar al sospechoso o delincuente además de señalar que el nuevo método podría pasar a ser utilizado sin haber agotado previamente otras opciones más complejas como entablar una negociación o la captura.
El 7 de julio Dallas se convirtió en el escenario de un sangriento tiroteo durante la celebración de una manifestación contra la brutalidad policial hacia los ciudadanos estadounidenses de raza negra.