"Se evidencia una explosión que tiene un frente de impacto y una proyección interna y externa a la planta, las láminas de acero de acuerdo a su espesor determinan la magnitud de la explosión, donde presumimos la utilización de un misil a distancia", expresó.
El ministro indicó que las autoridades investigan si el misil fue lanzado desde un dron o una embarcación.
"En este momento ha sido designado un comité técnico de investigación y estamos estudiando, investigando cuál fue o desde dónde fue lanzado, para que haya impactado contra esta planta de nuestra refinería de Amuay", agregó.
"Íbamos a incrementar significativamente la producción de la gasolina necesaria para nuestro pueblo; se trata de un acto terrorista deliberado, planeado de forma quirúrgica, con saña, para causar daños a objetivos estratégicos a esa planta, llamada planta 4, que afecta notablemente la operacionalidad de toda la península de Paraguaná (estado de Falcón), nuestra principal industria petrolera", apuntó.
Estas declaraciones se producen un día después de la denuncia que hizo el presidente Nicolás Maduro del ataque registrado el 26 de octubre.
El mandatario señaló que el peso de la torre derribada era equivalente a un tanque de guerra.
En la primera embarcación que arribó desde Irán, el Gobierno indicó que llegaron algunos repuestos necesarios para la reactivación de las plantas, fase que estaba en proceso.
Asimismo, el ministro aseguró que la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) está en capacidad de producir la gasolina que consume.
"Vamos a garantizar la continuidad de operaciones del CRP [Centro de Refinación de Paraguaná – Falcón, en el norte de Venezuela] y la producción de la gasolina".
PDVSA, aseguró El Aissami, está produciendo no solamente la demanda nacional de gasolina.
"Estamos por encima del consumo nacional en la producción de gasolina y estamos guardando reservas estratégicas o inventario", dijo.
"Tenemos 20 días de reserva estratégica, es decir que estamos acumulando y guardando gasolina, como parte de las reservas necesarias, para sostener cualquier tipo de acciones de esta extrema derecha o cualquier grupo terrorista que pretenda desestabilizar la paz (…) es decir que la gasolina se va a seguir produciendo en nuestras refinerías", sostuvo.
Ello, a pesar de que en más de 80 oportunidades el sector eléctrico e hídrico del estado Falcón, en el que se encuentra la refinería, ha sido objeto de ataques.