El 2020 parece por momentos un incendio. No solamente por la pandemia de COVID-19, que impacta en miles de millones de personas, la economía, cuya crisis latente detonó globalmente a niveles inéditos, las confrontaciones geopolíticas, sino por las perspectivas que se anuncian si no se logra detener varias de sus tendencias.
La IP organiza su cumbre inaugural, llamada "Internacionalismo o extinción", que tiene este viernes una serie de conferencias encabezadas por diferentes referentes de varios continentes.
"Las soluciones tienen que ser globales, necesitamos trabajar coordinadamente, internacionalmente, transfronterizamente, para hacernos fuertes, no solamente resistir los embates del orden mundial actual, sino sobre todo para poder pensar cómo transformarlo", explica Elizabeth Gómez Alcorta, miembro del consejo de la IP, abogada de derechos humanos, feminista, y actualmente ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad de Argentina.
La dimensión global quedó clara "luego de la crisis mundial del 2008", analiza. "Así como las crisis del sistema capitalista son globales, ya no hay crisis que afecten exclusivamente a un país, también entendemos que las soluciones tienen que ser globales", señala Gómez Alcorta.
La situación es más grave que en el 2008, es, de hecho, una continuidad, mutación de aquella crisis. "Partimos de un diagnóstico general del orden mundial, vinculado a los extremos en los que vivimos hoy en un orden capitalista en el si no llevamos adelante algunas acciones urgentes sabemos que, sin exagerar, estamos atacando a la naturaleza y a la especie en un modo voraz y rápido".
Las salidas
La actual crisis puede tener varias salidas. Una, por ejemplo, es la que, con ofensiva y articulación, encabezan diferentes fuerzas de derecha en el mundo marcadas por agendas que abarcan desde un nacionalismo conservador, neofascista, xenófobo, hasta discursos anticuarentena, antifeministas, antimigrantes. Otra, se asemeja a un gatopardismo: cambiar todo para que no cambie nada.
La IP, por su parte, sostiene en su presentación la necesidad de construir un mundo democrático, descolonizado, justo, igualitario, liberado, solidario, sostenible, ecológico, pacífico, poscapitalista, próspero y pluralista.
"Sabemos que para que la salida a la crisis no sea por derecha tenemos que trabajar de un modo muy concreto y muy organizado", analiza Gómez Alcorta.
"No naturalmente vamos a salir de esta crisis, en particular de la crisis mundial que nos toca atravesar en relación a la pandemia, más solidarios, solidarias, repensando nuestro vínculo con la naturaleza y el medio ambiente, comprendiendo el rol del Estado en términos de un Estado presente que asegure la sustentabilidad de la vida".
"Para poder trabajar en la salida del escenario de la crisis global tenemos que tener alianzas muy importantes, no solo de personalidades, sino vinculados a organizaciones sociales, movimientos populares, sindicatos, que nos permitan movilizar las fuerzas progresistas en lo que entendemos que tiene que ser un frente común".
La IP en América Latina
La Cumbre tendrá un panel sobre el continente llamado "Recuperar la democracia en América Latina". Participarán Gustavo Petro, de Colombia, Alicia Castro, de Argentina, y los candidatos a presidentes de Ecuador y Bolivia, Andrés Arauz y Luis Arce.
El panel podrá exponer la situación actual que atraviesa el continente donde, como explica Gómez Alcorta, "lo que está en juego es la vida democrática", y "recuperar la democracia es en definitiva repensar el sistema en el que nos toca vivir, y sobre todo poder pensarlo de manera colectiva, regional".
"Se ha criminalizado, hostigado, encarcelado, estigmatizado a importantísimos líderes y lideresas populares de varios países", explica Gómez Alcorta.
Eso se logró, en gran parte por la "utilización de los aparatos, poderes judiciales, de la mano de los medios de comunicación con discursos reaccionarios y bastante simples como suele suceder para llegar fácilmente con consignas a la ciudadanía en general".
El mapa de América Latina muestra grandes disputas, amenazas de golpe, como en Venezuela, que está bajo bloqueo económico, así como victorias electorales de signo opuesto, como las que tuvieron lugar en México con el triunfo del presidente Andrés Manuel López Obrador y en Argentina con Alberto Fernández; y el plebiscito que tendrá lugar en Chile el 25 de octubre para decidir si escribir una nueva Constitución y cuál será la modalidad.
"Tenemos una obligación en este presente de pensarnos en términos regionales". La Cumbre de la IP será una oportunidad para eso, con la riqueza de miradas que aportarán las perspectivas de diferentes referentes del mundo para comprender el cuadro global, común.