"El COVID-19 muestra la crisis que existe en la educación en Paraguay (…) Esto de transformar la educación presencial en una plataforma digital ha dejado una mayor desigualdad en la educación paraguaya, generando más brechas en el acceso entre los que pueden y los que no pueden, porque los que no tienen plata para pagar el Internet están quedando rezagados", dijo a esta agencia Ávalos.
El 22 de junio, el viceministro de Educación y Ciencias, Robert Cano, anunció que las clases presenciales no volverán este año, y el 27 de julio, se retomaron las clases virtuales o a distancia para estudiantes del sistema público y el sector privado.
Ávalos afirmó que en la educación pública de Paraguay existe una falta de capacitación, infraestructura y presupuesto.
La dirigente aseguró que 56% de las aulas están en mal estado, que solo 7.500 docentes de 70.000 han sido capacitados para enseñar por medio de las nuevas tecnologías y que solo 1.000 de 8.700 escuelas tienen acceso a Internet.
Sin embargo, el 29 de mayo Petta amenazó a los padres con denunciarlos si es que sus hijos no siguen el proceso educativo.
"El ministro dice que va a denunciar a los padres que no está contestando, pero él no es capaz de revisar cuál es el problema de la familia (…) el ministro quiere pintar un jardín donde no existe (…) es ridículo que quiera poner que todo está bien cuando hay estudiantes que ni siquiera tienen (el servicio de mensajería) WhatsApp por lo que ni siquiera les llegan las lecciones y a veces ni siquiera los profesores tienen computadoras", explicó Ávalos.
Un estado para los ricos
Este 18 de agosto, Petta afirmó que la educación actual es igual o mejor que varios países de América del Sur, informó el diario Última Hora.
Incluso el ministro aseguró que 87% de los alumnos continúa el proceso educativo a través de "plataformas virtuales".
Sin embargo, una encuesta reciente del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) indicó que solo 22% de los estudiantes se conecta a las plataformas virtuales y otro 52% lo hace mediante WhatsApp.
El 22 de mayo, el Senado paraguayo aprobó la censura de Petta por su supuesta mala administración frente a la pandemia del COVID-19.
Entre los cuestionamientos al ministro se encuentra la falta de una mesa de diálogo para coordinar acciones relacionadas a la educación en medio de la pandemia, así como la imposibilidad de acceder a plataformas en zonas rurales, informó el periódico Última Hora.
