"Era necesario para dar una plataforma de despegue a la economía argentina, pero esto no resuelve los problemas de Argentina", advirtió Guzmán en rueda de prensa desde el Palacio de Hacienda.
"La pandemia ha sido un golpe muy fuerte, estamos viviendo tiempos muy difíciles, pero hoy nos estamos ocupando de administrar esa situación de emergencia y estas noticias nos van a ayudar", auguró.
El ministro dijo que ansía que en Argentina haya un mercado de deuda pública en la propia moneda que esté estabilizado para posibilitar la capacidad de ahorro de los ciudadanos y otorgar beneficios a las Pymes con créditos más baratos.
"Estamos sentando condiciones para que, cuando la pandemia nos deje tregua, el país pueda despegar, se pueda poner de pie y pueda establecerse en un sendero de desarrollo como aquel que consideramos sano para las familias de nuestro país", manifestó.
Argentina buscaba reestructurar 66.238 millones de dólares de deuda soberana.
La oposición política en Argentina inició un reclamo días atrás para que el Gobierno de Alberto Fernández difunda un plan económico de acción para los meses venideros.
Guzmán aseguró que el Gobierno tiene "una estrategia económica" y adelantó que para sanear las finanzas públicas, "es necesario que haya programa con el FMI porque Argentina no tiene capacidad de pagarle al FMI en los tiempos establecidos".
El Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019) firmó en septiembre de 2018 un acuerdo de entendimiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para el desembolso de 50.000 millones de dólares, que luego se extendieron a 57.000 millones y, finalmente, quedó en 45.000 millones de dólares.
"Vamos a transitar el camino de un programa con el FMI que sea distinto al anterior", adelantó Guzmán, y agregó que las nuevas conversaciones ahondarán aspectos relativos a las políticas fiscal y monetaria en momentos de recesión.
Proteger a los sectores que caigan en situaciones de alta vulnerabilidad por la pandemia con programas de transferencia de ingresos directa (subsidios), proteger al trabajo y la producción son los objetivos actuales del Gobierno argentino, según dijo quien dirige los destinos de hacienda.
Luego, generar valor agregado en la economía y divisas "para alcanzar esos objetivos".
El Gobierno argentino extendió el plazo de las negociaciones que vencían este martes y puso como fecha límite el 24 de agosto para concretar el entendimiento con el Grupo Ad Hoc de Bonistas Argentinos, el Comité de Acreedores de Argentina y el Grupo de Bonistas del Canje y otros tenedores, que habían rechazado las anteriores propuestas.