"Resultando aprobado se convierte en ley y se comunica al Poder Ejecutivo Nacional", anunció la senadora Claudia Ledesma Abdala, que en ese momento presidía la sesión.
Esta iniciativa, aprobada por la Cámara de Diputados el pasado 25 de junio, reconoce las obligaciones de los empleadores y establece una serie de presupuestos legales mínimos para los trabajadores que se acojan a la modalidad del teletrabajo.
El senador oficialista Mariano Recalde observó durante la sesión que la desconexión digital "es una garantía para que se cumpla el derecho a una jornada limitada".
"Es muy sana la indicación de la ley de prohibir al empleador enviar comunicación fuera del horario de trabajo", observó el legislador al defender el proyecto.
El empleador, por su parte, debe facilitar el equipamiento que necesite el trabajador para realizar sus tareas, así como el apoyo necesario para el desempeño de sus labores, lo que incluye asumir costos o compensaciones por el empleo de los instrumentos que sean necesarios para llevar adelante el trabajo.
También se reconoce el derecho a retornar al trabajo presencial, y marca unos mínimos requisitos de seguridad e higiene.
Críticas
El senador opositor Luis Naidenoff criticó que la mayoría oficialista no aceptara modificar el proyecto que llegó de Diputados.
La ley salió adelante pese a la negativa de la oposición, a diferencia de lo que sucedió en la cámara baja, cuando el proyecto fue aprobado por la inmensa mayoría de los legisladores —con apenas 29 abstenciones y un voto negativo entre los 251 sufragios emitidos.
Las condiciones que establece la ley entrarán en vigor 90 días después de que termine el "aislamiento social, preventivo y obligatorio" que rige en Argentina desde el 20 de marzo con motivo de la pandemia del nuevo coronavirus.
