"En agosto tenemos una instancia de conciliación en la justicia; estamos analizando las posibilidades jurídicas que se abren", dijo a Sputnik García.
García aseguró que sea cual sea el destino final de la pieza, el Gobierno va a garantizar que ese símbolo no sirva para publicidad ni culto nazi.
El Gobierno de Uruguay deberá optar entre apelar el fallo de 2019, que resolvió subastarla y repartir lo recaudado entre el Estado y quienes realizaron el rescate, o llegar a una conciliación con los últimos.
El 22 de junio la justicia uruguaya ordenó al Ministerio de Defensa vender el águila nazi del acorazado alemán Graf Spee, que se hundió en las costas del Río de la Plata tras una batalla con buques británicos en diciembre de 1939.
El fallo condena al Ministerio de Defensa Nacional y a la Prefectura Nacional Naval a "disponer y realizar la venta onerosa del Águila y del Telémetro del Graf Spee dentro de un plazo de 90 días [contados desde que quede ejecutoriada la sentencia] y a compartir el 50% de lo producido con los permisarios".
Tras varios días de negociaciones diplomáticas entre el Gobierno alemán, el británico y el uruguayo, el capitán del buque nazi ordenó la destrucción de la nave, para luego suicidarse.
Los más de 1.000 tripulantes del acorazado alemán fueron traslados a Montevideo y a Buenos Aires.
La Batalla del Rio de la Plata fue el primer enfrentamiento naval entre Alemania y el Reino Unido de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), y el único de esa conflagración que se desarrolló en América del Sur.