"La estructura del campanario tiene 20 metros de altura, y repicará de manera especial con las horas del Ángelus a las 6:00 de la mañana, 12:00 del mediodía y las 6:00 de la tarde, también repicara cada media hora", precisó el portal oficialista 19Digital.
Enclavada en el centro histórico de Managua, donde convergen las avenidas Bolívar y Chávez, la imponente Campana de la Paz marcará a partir de ahora el tempo en la capital nicaragüense, que no escatimó en gastos para recordar la victoria de la Revolución sandinista.
Fabricada en Holanda, por los mismos artesanos responsables de las campanas de las catedrales de Managua y León, esta mole broncínea lleva grabada la leyenda "Siempre más allá… como hermanos y hermanas tocaré las horas para mi Patria Nicaragua".
"Paz, amor, familia, comunidad, luchas y victorias, priorizando siempre la paz y la vida que van a ser todo el tiempo recordadas y estarán presente a través del repique hermosísimo de esta campana", declamó la vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, sobre el monumento.
Más allá de su impronta esotérica, la Campana de la Libertad se inserta en un plan para revitalizar el casco histórico de Managua, que incluye intervenciones en el puerto Salvador Allende, el paseo Xolotlán, la plaza de la Revolución, el parque Luis Alfonso Velásquez o el gimnasio Alexis Argüello.
Aunque la asistencia fue reducida por las medidas sanitarias, el Gobierno sandinista recibió saludos de aliados políticos y simpatizantes de diversos rincones del mundo.
