"En las últimas 15 horas se ha observado un incremento de la actividad volcánica en el volcán Sangay", dijo el viernes el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional en un comunicado.
El Sangar se ubica en la provincia de Morona Santiago, en el este de Ecuador.
Adicionalmente, se registró un aumento del alcance de la nube de ceniza hacia el occidente, que llegó hasta más de 600 km del volcán, y un aumento de la cantidad de alerta termales en el flanco sur-oriental del volcán, que se asocia a una mayor emisión de lava.
Al momento la actividad del Sangay se califica como alta con tendencia ascendente.
Según los técnicos de la Escuela Politécnica, una nube de ceniza del Sangay se dirige al suroccidente y noroccidente del volcán, por lo que alertó de la posible caída de ceniza en las provincias de Chimborazo, Tungurahua, Cotopaxi, Bolívar, en el centro del país; Azuay Cañar, en el sur; y Guayas y El Oro, en el oeste.
De acuerdo con la dirección del viento, otras provincias podrían también sufrir problemas.
El aumento de material en la cabecera del Río Volcán también podría provocar aumento de sedimentos e incluso lahares en los Ríos Volcán y Upano, en la amazonía, advirtió el Instituto.
El Sangay está en erupción desde mayo de 2019; es el último volcán en el sur del Ecuador, ubicado en la Cordillera Real.
Según el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional, dicho volcán es uno de los más activos del país; se mantiene en actividad eruptiva constante desde 1628.
En este volcán, cuya altitud es de 5.230 metros sobre el nivel del mar, es común la generación de flujos piroclásticos, flujos de lava y lahares.
