"Desde el inicio del brote se realizaron 51.900 pruebas diagnósticas para esta enfermedad, lo que equivale a 1.143,8 muestras por millón de habitantes".
Durante la víspera se realizaron 1.995 nuevas muestras, lo que llevó a que el país llegara a la mayor cantidad de pruebas procesadas por cada 1.000 personas desde que se detectara el primer caso de coronavirus en el país el pasado 3 de marzo.
La tasa de letalidad del COVID-19 en Argentina es así del 4,9%.
En cuanto al total de casos, 1.684 (43,3%) son contactos estrechos de casos confirmados, 900 (23,1%) son importados, y 829 (21,3%) son casos de circulación comunitaria y el resto se encuentra en investigación.
La jurisdicción de Buenos Aires es el distrito más afectado de Argentina, con 1.331 casos de coronavirus (56 nuevos).
Le sigue la capital argentina, que alcanzó 1.007 (36 nuevos).
Hasta el momento fueron dadas de altas 1.140 personas.
El número de casos descartados hasta la víspera es de 39.990 (por laboratorio y por criterio clínico/ epidemiológico).
Las principales franjas etarias afectadas de los casos registrados corresponden a personas de entre 20 y 59 años, siendo la edad promedio de 43 años.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, anunció el 25 de abril que el aislamiento social y obligatorio que expiraba el 26 de abril se extenderá dos semanas más, hasta el 10 de mayo, aunque el confinamiento se flexibilizará para que se pueda movilizar la mitad de la población.
El aislamiento continuará sin modificaciones en los centros urbanos de más de 500.000 habitantes.
En el resto de los municipios, se dejará a criterio de las autoridades provinciales qué actividades o municipios podrán flexibilizar el confinamiento, aunque desde el Ejecutivo se establecieron cinco requisitos en relación a la contención del brote obligatorios para continuar en esta modalidad.
El mandatario también anunció la posibilidad de que los niños salgan a dar paseos con un adulto en un radio de 500 metros de su hogar y por un máximo de una hora.