"Se produjo un motín en el dormitorio 3 de la Torre 1 de la Cárcel de Puente Alto, en el que los internos tomaron a tres gendarmes como rehenes", informó Gendarmería al medio chileno.
Los gendarmes fueron despojados de sus uniformes por los presos, situación que rápidamente fue controlada, los uniformes fueron recuperados y los guardias derivados al centro asistencial más cercano, donde se constataron que tenían lesiones leves.
La situación se sumó a otros incidentes y desórdenes ocurridos anteriormente en el mismo lugar, debido a que esa cárcel concentra la mayor cantidad de presos contagiados en el país con COVID-19 (enfermedad causada por el nuevo coronavirus), con más de 150 infectados, y los internos alegan incumplimientos en los protocolos de higiene.
El 3 de marzo se confirmó en Chile el primer caso de COVID-19, y el 19 del mismo mes comenzó a regir el estado de catástrofe en todo el territorio nacional: se cerraron las fronteras para extranjeros no residentes, se prohibieron los eventos de más de 50 personas y se decretó toque de queda nocturno.
Hasta la fecha se han contagiado 11.296 personas en el país y 160 de ellas han fallecido.