En todos los casos, la aplicación de medidas sanitarias "es voluntaria, entre otras cosas, porque el proceso de México se ha sustentado en el llamado a la participación ciudadana voluntaria, no ha habido utilización del uso de la fuerza, no ha habido toque de queda, ni ese tipo de medidas", indicó el presidente.
Las autoridades sanitarias informaron que algunas regiones del país ya viven condiciones que corresponden a la fase tres, después de las primeras dos etapas de contagios importados y comunitarios, ante lo cual aplicarán "filtros" para evitar la propagación hasta el 1 de junio, cuando reinicien todas las actividades escolares y productivas.
"Cada vez que se aborda el tema de la reducción de movilidad, por analogía y comparación de medidas en países europeos y EEUU se pregunta si va a intervenir la fuerza pública: en forma sistemática respondemos no", enfatizó el subsecretario federal de Salud.
Solo 483 municipios tienen al menos una persona contagiada de 2.470 localidades administrativas en este país, es decir, el 19,6% del total de las entidades municipales en todo el territorio nacional.
"No tenemos intención de militarizar la salud pública por ser innecesaria e inconveniente, porque hasta ahora la ciudadanía ha respondido muy bien", subrayó López Gatell.
El principal portavoz de las autoridades sanitarias estima que decretar toques de queda o cuarentenas obligatorias "perturbaría la dinámica social, la contribución positiva es una acto de conciencia y persuasión del riesgo familiar, comunitario y social, para evitar que se propague la epidemia".
El objetivo de los filtros que diseñan los responsables federales es disminuir la movilidad entre regiones de distinta intensidad de transmisión, para evitar los contagios acelerados de la fase tres.
Por ejemplo, los mercados públicos que concentran cientos o miles de personas serán segmentados en calendarios de productos en fechas y lugares distintos.
El modelo de Vigilancia Centinela que aplica este país observa los resultados de más de 45.000 análisis de laboratorio realizados hasta la fecha como una encuesta, y multiplica por el factor ocho los contagios confirmados, que elevaría a unas 50.000 las infecciones reales.
En México han sido detectados a 6.297 casos confirmados por laboratorio de la enfermedad COVID-19 y se han registrado 486 defunciones.