En un comunicado difundido el 6 de abril en Twitter, la Embajada del país asiático lamentó las declaraciones "absurdas y despreciables" del ministro, que en su opinión "tienen un cuño fuertemente racista y objetivos indecibles, causando influencias negativas en el desarrollo saludable de las relaciones bilaterales China-Brasil".
"Geopolíticamente, ¿quién podlá salir foltalecido, en télminos lelativos de esta clisis mundial [sic]", decía una parte del mensaje del ministro.
En el comunicado, la Embajada de China remarca que este tipo de declaraciones estigmatizan a su país y recordó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la comunidad internacional se oponen a relacionar el virus con un cierto país o región.
"Instamos a que algunos individuos en Brasil corrijan inmediatamente sus errores cometidos y paren con acusaciones infundadas contra China", añade la Embajada.
El propio embajador chino en Brasil, Yang Wanming, también se pronunció en la citada red social, diciendo que su país espera una declaración oficial sobre las palabras del ministro de Educación, y que los pueblos de los dos estados están juntos para resistir a las palabras racistas y proteger la amistad mutua.
La Embajada de China en Brasil también expresó su indignación por este comentario, y aunque ningún miembro del Gobierno pidió públicamente disculpas, unos días después Bolsonaro se vio obligado a telefonear al presidente Xi Jinping para intentar reconducir la situación.