"Nuestra misión ante la OEA pedirá formalmente que un tercero realice una comparación de ambos estudios y dilucide las discrepancias entre ellos", dijo el portavoz oficial de la cancillería Roberto Velasco, en una declaración escrita enviada a la prensa extranjera acreditada.
La investigación realizada por dos expertos del MIT fue publicada el 27 de febrero en el periódico estadounidense The Washington Post, según el cual la OEA "no tenía motivos para declarar que hubo fraude en Bolivia".
"En relación al artículo de Jack R. Williams y John Curiel, del MIT Election Data and Science Lab, se trata de un análisis de dos especialistas de gran prestigio y que no podemos considerar tengan un interés político", indica Velasco, director general de Comunicación Social de la oficina del canciller Marcelo Ebrard.
Al contrario, la investigación de Williams y Curiel concluye que "no hay ninguna evidencia estadística de fraude que podamos encontrar", tras la suspensión del conteo.
El estudio publicado señala que "las tendencias en el conteo preliminar, la falta de un gran salto en el apoyo a Morales después del alto [en el conteo] y el tamaño del margen de Morales parecen legítimos; con todo, el análisis estadístico y las conclusiones de la OEA parecerían profundamente defectuosos".
La declaración de Velasco señala que esas discrepancias "ponen en entredicho el análisis de la OEA".
"Desde nuestra perspectiva, dados los resultados del estudio (de los expertos del MIT), mismos que ponen en entredicho el análisis de la Organización de Estados Americanos y lo expresado por su secretario general, Luis Almagro, la Organización deberá aclarar y explicar las deficiencias en su informe dadas a conocer por estos dos investigadores", dice el portavoz oficial de Ebrard.
Tras dimitir a su cargo, el 13 de noviembre pasado el expresidente y líder indígena boliviano Evo Morales llegó la Ciudad de México desde Bolivia en un avión de la Fuerza Aérea Mexicana, donde recibido con un abrazo por Ebrard.
La administración del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, concedió asilo político al exmandatario, alegando razones humanitarias y una situación de urgencia en Bolivia, donde su vida y su integridad corrían riesgo.