"La guerra se produce en las mentes de las personas que no valoran la vida. Posiblemente el coronel Monterrosa, en un momento de locura, ordenó esa grosería", declaró Bustillo ante un Juzgado de Instrucción, al referirse a la masacre perpetrada del 10 al 12 de diciembre de 1981 en el cantón de El Mozote, en la cual fueron asesinados cerca de 1.000 civiles.
La declaración de Bustillo ante un juez del municipio de San Francisco Gotera, cabecera del oriental departamento de Morazán, rompe con la narrativa de las Fuerzas Armadas respecto a la matanza ejecutada por el Batallón de Infantería de Reacción Inmediata "Atlacatl", a las órdenes de Monterrosa, militar entrenado por EEUU en la Escuela de las Américas.
"Yo solo procedí a brindar dos helicópteros que se me solicitaron de la III Brigada. Yo no podía darle ninguna orden a un comandante de Infantería. Esos eran los procedimientos en ese entonces. Yo no tuve conocimiento qué hizo el Batallón Atlacatl, no sabía que estaba en Morazán. Me di cuenta hasta que (cuando) la masacre salió en los periódicos", declaró el exmilitar.
La defensa de Bustillo solicitó que en la sala solo permaneciera la parte fiscal, la defensa y el juez y que fueran retirados víctimas y periodistas, pero el magistrado desestimó la petición.
Varios acusados afirmaron entonces que la Fuerza Armada solo cumplía su papel constitucional durante el conflicto armado.
El juzgado recibió entonces los dictámenes de peritos en materia militar, histórico-documental y antropología social que avalan la evidencia sobre la participación de la cadena de mando militar en la consumación de la masacre.
La investigación del Mozote fue reabierta después de que la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia derogara en 2016 la Ley de Amnistía General suscrita en 1993, tras la firma un año antes de los Acuerdos de Paz que pusieron fin al conflicto armado.
Varias investigaciones señalan que la guerra civil en El Salvador dejó unos 75.000 muertos y desaparecidos.
Las organizaciones que integran la Mesa contra la Impunidad en El Salvador reclamaron al presidente de la República, Nayib Bukele, que en su condición de Comandante en Jefe del Ejército ordena la total apertura de los archivos militares y la reconstrucción de los que fueron destruidos