"Hacemos un llamado a las autoridades municipales y regionales que recientemente han tomado posesión de sus cargos [el 1 de enero], para que incluyan en sus acciones de gobierno la protección de las comunidades y de sus líderes. Insistimos en la necesidad de poner en marcha una política pública nacional para enfrentar esta amenaza", señalaron los obispos en un comunicado con fecha del 15 de enero, pero difundido solo hasta este 16 de enero.
"Los obispos sentimos inmenso dolor, preocupación y rechazo al recibir, cada día, en lo recorrido de este 2020, noticias de asesinatos de líderes y de amenazas a las comunidades", señaló el texto.
Por último señaló que la Iglesia católica colombiana valora el esfuerzo de los líderes y el aporte que brindan "a la construcción de una sociedad en la que se respete la dignidad humana y sus derechos, y se haga realidad la justicia".
Según la Organización de Naciones Unidas (ONU), en los primeros trece días de 2020 al menos diez líderes sociales fueron asesinados, mientras que en 2019 se registró la muerte de 107 de ellos, aunque trece más están en proceso de verificación.