Los sucesos "lastiman la convivencia democrática en ese país hermano y complican las negociaciones que diversos actores políticos llevan a cabo en diferentes espacios de interlocución, en busca de encontrar una salida pacífica a la crisis venezolana", señaló la Copppal en un comunicado de prensa.
El 5 de enero se realizó la elección de la junta directiva del parlamento venezolano, como establecen las leyes de esa nación sudamericana.
Entre tanto, el diputado opositor Luis Parra, apelando al reglamento de interior y debates, fue juramentado como nuevo presidente, junto a Franklin Duarte, primer vicepresidente, José Noriega, segundo vicepresidente, y Negal Morales, secretario.
Por su parte, la Copppal manifestó su preocupación por el hecho de que el acceso al recinto legislativo venezolano haya "sido selectivo y gestionado por una fuerza armada y no por los legisladores mismos", limitando los derechos de los diputados, miembros del cuerpo diplomático y de los medios de comunicación.
El presidente de la Coppal, Alejandro Moreno Cárdenas, insistió en que deben ser los venezolanos quienes de manera soberana y mediante el diálogo respetuoso decidan sus procesos políticos sin intervención de ningún interés externo.
"Es responsabilidad de todos los partidos políticos de esa nación trabajar por la restitución de la armonía en la vida pública, evitando la pulverización de las expresiones políticas y el debilitamiento de las instituciones como resultado de su división", sentenció.
Estados Unidos y otros países han desconocido la elección de la nueva junta directiva y la calificaron como un "golpe" en el parlamento venezolano.
El presidente Nicolás Maduro reconoció a la actual junta directiva de la Asamblea.
Guaidó se autoproclamó como presidente interino de Venezuela en enero de 2019 tras desconocer el mandato de Maduro para el período 2019-2025, y recibió el respaldo de 53 países, de los cuales la mayoría de los embajadores acudieron a la sesión del 5 de enero.