"En cuanto a las pérdidas, (...) estamos hablando de 2.000 millones de dólares; nuestra proyección estimada (del crecimiento del PIB) creemos que va a ser un 3,2%", dijo el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Rolando Kempff, citado por el diario La Razón.
El ministro de Desarrollo Productivo, Wilfredo Rojo, dijo el 25 de noviembre que preveía "una baja del PIB", aunque sin dar cifras, como consecuencia de los conflictos todavía no totalmente superados, en especial bloqueos en rechazo a Áñez que afectan zonas agrícolas del centro y el oriente del país.
El Gobierno de Morales había programado que Bolivia volvería a registrar este año el índice de crecimiento económico más alto de Sudamérica, como ocurrió en el quinquenio pasado, pero esa meta parecía ya fuera de la realidad, admitió Rojo.
Los problemas económicos son "el precio de la democracia", dijo el ministro.
El presidente de la CNC sostuvo que el golpe sufrido por la economía era una oportunidad para dar mayor impulso a la diversificación, aprovechando por ejemplo el talento profesional en diversos rubros.
Planteó además "impulsar la economía naranja para [que] el desarrollo no solo dependa de la extracción, sino encontrar nuevas metodologías de exportación, exportación de servicios, exportación de talentos, software, todo lo referente a lo que es la economía", según el diario.
El dirigente empresarial planteó también liberalizar las exportaciones y buscar nuevos mercados en la región, en la Unión Europea y en los países de la Alianza del Pacífico (Chile, Colombia, México y Perú).
