"Se portaron muy generosos, privilegiando el espíritu diplomático de México y la preservación de la vida de la tripulación y de los pasajeros sobre cualquier otra diferencia", dijo el diplomático en entrevista con el periódico La Jornada.
Esa autorización fue clave, además de la colaboración del Gobierno de Paraguay, que permitió una escala técnica de la aeronave en Asunción y de una gestión del presidente electo argentino, Alberto Fernández, revelada por el canciller Marcelo Ebrard.
La colaboración de Brasil "nos sorprendió, pero estamos muy agradecidos por ese paradójico hecho", dijo el vicecanciller.
El avión tipo Gulfstream G550, de la Fuerza Aérea Mexicana, había logrado llegar a Bolivia gracias a una escala en Perú.
Las gestiones las hizo la embajadora mexicana en Bolivia, María Teresa Mercado, quien encabezó negociaciones diplomáticas en las que "no hubo ninguna condición, no hubo que hacer nada a cambio, hay que reconocerlo, hubo entendimiento y solidaridad", dijo el jefe de la diplomacia mexicana hacia Latinoamérica.
Cuando Morales ya estaba a bordo del avión, "Perú nos avisa que ya no vamos a cargar combustible en su aeropuerto, aunque habíamos acordado que sí, eso obligó a la aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) a volar a Paraguay", relató el diplomático.
Reyes Zúñiga representa el ala más izquierdista de los funcionarios de la Cancillería que encabeza Ebrad, quien por su parte fue jefe de Gobierno de la Ciudad de México (2006-2012), como sucesor en ese cargo del presidente Andrés Manuel López Obrador, que también gobernó la capital.
El vicecanciller dijo que "no tomamos nada personal, aunque sí nos preocupa que haya habido actitudes que pusieron en riesgo la vida de connacionales y de alguien que ya estaba protegido por el Estado mexicano", el presidente Morales.
El líder boliviano que gobernó desde enero de 2006 al 10 de noviembre pasado, cuando renunció a su cargo para evitar que se extendiera la violencia, llegó el 12 de noviembre pasado en un avión de la Fuerza Aérea Mexicana enviado por López Obrador a Bolivia, tras concederle asilo político.
