La viuda de Franco, Mônica Benício, presente en la manifestación, pidió cautela y llegar hasta el final: "Las ultimas noticias son muy preocupantes, independientemente de la línea que se esté siguiendo las autoridades tienen que investigar todo, independientemente de quién aparezca y qué cargo de poder esté ocupando", dijo en declaraciones a Sputnik.
Esta semana, la cadena de televisión local Globo publicó que uno de los presuntos asesinos de la concejala, Élcio de Queiroz visitó la urbanización de Río donde mantiene su residencia el presidente Bolsonaro el mismo día del crimen (14 de marzo de 2018) y que accedió después de que alguien que se identificó como "don Jair" le autorizara a entrar.
Bolsonaro reaccionó de forma airada negando cualquier relación con el crimen y criticando duramente a la prensa brasileña, que en su opinión está conspirando para derribar su Gobierno.
Sin citar el nombre de Bolsonaro, referencia prácticamente ausente en la manifestación, Benício lamentó la "guerra mediática" y toda la desinformación alrededor del caso.
"Esta confusión es muy peligrosa, porque en realidad indica un camino de impunidad", alertó.
Los autores materiales del crimen, Élcio de Querioz y Ronnie Lessa, están presos desde marzo del año pasado a la espera de un juicio, y la viuda de Franco teme que las filtraciones de los medios acaben anulando pruebas o ayudando a que los dos asesinos salgan inocentes.
"Quedan dudas sobre si el Estado no sabe responder quién mando matar a Marielle o si de hecho no quiere responder quién mandó matarla", añadió.
Benício también expresó su satisfacción al saber que la promotora del Ministerio Público de Río de Janeiro, Eliza Bastos de Carvalho, pidió dejar el viernes las investigaciones del caso Marielle.
Esta semana salieron a la luz unas imágenes de Bastos con camisetas en favor de Bolsonaro (durante la campaña electoral del año pasado) y junto a diputados del partido del mandatario que se hicieron famosos por romper una placa en homenaje a la concejala asesinada.
La semana que viene hay previstas nuevas concentraciones tanto en Río de Janeiro como en São Paulo (sureste).
Franco pertenecía al Partido Socialismo y Libertad y destacó por su defensa de las mujeres, negros, el colectivo LGBT y los habitantes de las periferias y favelas.
Fue asesinada en el centro de Río de varios disparos en la cabeza junto a Anderson Gomes, el conductor del vehículo en el que viajaba.