"Una patrulla del Ejército, que se desplazaba por la carretera Ruta 5, uno de sus integrantes habría sido el autor del disparo que dio muerte al joven", confirmó el fiscal de la Región del Maule (sur), Julio Contardo a Radio Biobío.
José Uribe, la víctima, estaba participando el 21 de octubre en una manifestación pacífica en el centro de Curicó, y cuando caminaba hacia su casa por el costado de la carretera, habría pasado el vehículo militar disparando.
Además de Uribe, otros dos jóvenes en Curicó fueron alcanzados por disparos de los militares esa misma jornada: Nicolás Espinoza, de 23 años, y Ricardo Solís, de 26, quienes están siendo atendidos en el Hospital de Curicó sin riesgo vital.
A pesar de que la situación ocurrió el lunes 21, este 22 de octubre las autoridades de Gobierno no se refirieron al caso ni tampoco entregaron información.
De hecho, el subsecretario Rodrigo Ubilla informó erróneamente el 22 de octubre que solo dos personas han muerto por impactos balísticos en el contexto de las manifestaciones de los últimos días, pero de hecho son tres.
Sus muertes se suman a las once personas que han muerto calcinadas al interior de supermercados saqueados e incendiados; a una persona que falleció electrocutada en el Barrio Franklin en Santiago; y a un joven que fue atropellado por un camión de la Armada de Chile en la ciudad de Talcahuano (sur): en total son 16 las personas fallecidas en el marco de las protestas.
Las movilizaciones en Chile comenzaron el 14 de octubre en rechazo al alza del precio del pasaje del Metro de Santiago, y a pesar de que el 19 de octubre el presidente Sebastián Piñera anunció que no se aplicará el aumento, las protestas continuaron.
El Estado de Emergencia es la medida que faculta al Gobierno a desplegar al Ejército y a las Fuerzas Armadas en las calles, cuya presencia ha generado rechazo y resquemor entre los ciudadanos.
Piñera anunció que este 22 de octubre se reunirá con la oposición política y los presidentes de partidos para buscar una solución a las demandas sociales, y lograr un "acuerdo social", reunión que aún no ha sido confirmada por todos los líderes políticos invitados.