"Aprovecho para agradecerle al presidente Donald Trump por tener esta actitud de respeto a México, considero que es muy importante que se mantengan y se fortalezcan las relaciones con EEUU y Canadá, estamos haciendo lo que nos corresponde", dijo el mandatario en conferencia de prensa.
López Obrador afirmó que "fue un encuentro exitoso y satisfactorio para los dos gobiernos", al comentar la evaluación del acuerdo migratorio celebrada en Washington el 10 de septiembre.
"En aquella ocasión no fueron groseros, pero sí estaban en una postura más rígida, ahora fue distinto, hubo un reconocimiento a que se cumplieron los compromisos de parte nuestra; y se alejó el riesgo la amenaza de imponer aranceles de manera unilateral a las mercancías que se producen en México y se venden en EEUU", agregó.
Por un acuerdo comercial
Además de agradecer a Trump por su disposición al diálogo, el jefe de Estado mexicano reconoció "su voluntad de que haya entendimiento en el tema migratorio, y en lo que corresponde a la relación económica y comercial entre México, EEUU y Canadá".
El Tratado México, EEUU y Canadá (T-MEC), que reemplazará al Tratado de Libre Comercio de América del Norte ya fue aprobado por el Senado mexicano, pero aún se discute en el Congreso estadounidense y el Parlamento canadiense.
"Lo que viene y estamos esperando, porque consideramos que conviene a las tres naciones y a los tres pueblos, es la firma o aprobación del tratado en el Congreso de EEUU y en Canadá", prosiguió el jefe del Ejecutivo federal.
López Obrador hizo "un llamado respetuoso" a los legisladores de los países norteamericanos socios "para que nos ayuden, que nos ayudemos mutuamente porque nos conviene la aprobación del tratado por los tres países, ojalá se haga pronto".
La preocupación de López Obrador es que hay procesos electorales en puerta e indicó que espera que este "asunto no se mezcle con las diferencias naturales que se presentan en una contienda electoral".
Ebrard dijo al final del encuentro que el flujo migratorio se ha contenido en un 70% y que "la tendencia es irreversible y va ser permanente".
El canciller expuso a Pence el interés del Gobierno mexicano en que también se examine el tema de las 200.000 armas que se trafican anualmente en forma ilegal desde EEUU a México.
Asimismo reafirmó a sus contrapartes que un acuerdo de 'tercer país seguro', donde los indocumentados tramiten sus solicitudes de asilo en EEUU, no es aceptable para México como opción posible.
Recordó que el Gobierno mexicano está financiando la creación de 60.000 empleos en Guatemala, Honduras y El Salvador, mediante programa sociales.
