"Recibimos con beneplácito cualquier iniciativa de diálogo con todos los actores y, como decía el presidente Hugo Chávez: "si es el diablo, con el mismo diablo me siento a conversar", pero nosotros estamos muy claros de que la paz en Venezuela, la paz política, la paz social es indicativo, es un elemento esencial para la paz de la región", indicó Díaz.
El 29 de agosto una fuente del diálogo entre el Gobierno y la oposición aseguró a Sputnik que estaban en desarrollo nuevos acercamientos, tras la suspensión del proceso el pasado 8 agosto, luego de que el Gobierno de EEUU aplicara nuevas sanciones a Venezuela.
La vicepresidenta de la ANC, integrada únicamente por oficialistas, aseguró a Sputnik que el presidente Nicolás Maduro en numerosas ocasiones ha hecho llamados al diálogo.
"Ya perdimos la cuenta de la cantidad de que el presidente Maduro ha hecho llamados al diálogo, la mesa de parte del Gobierno siempre está servida y a la espera de que se integren los sectores de la oposición", añadió la también vicepresidenta del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela.
Agregó que la paz que buscan los sectores que calificó como "más extremistas" de la oposición y "enemigos externos" de Venezuela, es, a su juicio, ficticia y puede implicar una desestabilización regional.
El proceso de diálogo entre el Gobierno y la oposición se dio a conocer en mayo pasado, tras cinco meses de una de las mayores crisis políticas de la gestión de Maduro.
La Asamblea Nacional (parlamento unicameral de mayoría opositora), declarada en desacato tras seis meses de haber comenzado su mandato, decidió desconocer la reelección de Maduro para el período 2019 - 2021 por considerar que fue elegido en comicios ilegítimos.
En su lugar el presidente de ese órgano, Juan Guaidó, se autoproclamó como "presidente encargado", y su autonombramiento fue reconocido por 54 países, entre ellos EEUU, los cuales han aplicado sanciones y medidas contra Venezuela, que buscan derrocar a Maduro.