El Ministerio Público (Fiscalía), resaltó en un comunicado que quiere los nombramientos para cargos de embajador deben seguir criterios que representen "efectiva experiencia diplomática del candidato", por lo que presentó una acción civil pública "en carácter de urgencia" para que se respeten al menos tres requisitos.
Esos requisitos son que el postulado tenga experiencia en actividades diplomáticas, que haya prestado servicios relevantes para la diplomacia del país y que esas actividades sumen, al menos, tres años de experiencia.
Los fiscales dejan en claro que cuestionan la decisión de Bolsonaro por la falta de preparación de su hijo, y no por nepotismo.
"No se cuestionan eventuales consideraciones sobre el posible impedimento en razón del parentesco de Eduardo, sino solamente la definición de los criterios técnicos que deberían guiar esa decisión", puntualizan.
La jueza federal Flávia de Macêdo Nolasco recogió la petición de los procuradores y dio un plazo de 10 días al Estado para que se manifieste antes de tomar una decisión, según medios locales.
Eduardo Bolsonaro es diputado federal por el estado de Sao Paulo (sureste), tiene 36 años y ninguna experiencia diplomática, aunque en esta legislatura preside la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados.
Su nombramiento como embajador fue muy criticado por la oposición e incluso por aliados del presidente, pero Bolsonaro se defendió argumentando que su hijo domina el inglés y el español y tiene buenas relaciones con la familia del presidente de EEUU, Donald Trump.
