En una nota divulgada por la cancillería, se destaca el "excelente" nivel de las relaciones entre los dos países, y lo atribuye a la sintonía personal entre Abdo Benítez y su homólogo brasileño Jair Bolsonaro, por su "entera convergencia de valores entre los dos Gobiernos en lo que concierne a la promoción de la democracia en la región y la protección de los derechos de la familia".
La nota oficial no menciona la intención de rehacer el acuerdo de Itaipú, a pesar de que la prensa local apunte que este 1 de agosto una delegación paraguaya visitará Brasilia para interrumpir el acuerdo que podría costarle el cargo al presidente.
La Cancillería "espera" que la cooperación con Abdo Benítez "pueda proseguir", incluyendo la implementación "en beneficio mutuo, de los compromisos de los dos países al amparo del Tratado de Itaipú", siendo ésta la única mención directa al origen del problema.
La crisis en el país vecino estalló en los últimos días, cuando salió a la luz el acuerdo sobre Itaipú, firmado el 24 de mayo.
El documento establece nuevos términos para la contratación de potencia de Itaipú y establece nuevas tarifas y una entrega mayor de electricidad a Brasil, lo que según los críticos se traducirá en mayores costos para Paraguay.