"Le pido a Dios para que Venezuela siga avanzando hacia acuerdos de paz, estabilidad, hacia una mesa permanente de diálogos, de paz, de donde salgan soluciones para los problemas que tiene Venezuela, donde salga una visión común para los problemas, para las soluciones que necesita Venezuela", expresó durante un acto en el estado Miranda (norte).
En ese sentido, Maduro reiteró la propuesta de conformar una mesa permanente de diálogos con todos los sectores ese país caribeño.
"Una mesa permanente de diálogos con las oposiciones, con el Gobierno, en el campo político, en el campo económico con todos los empresarios, en el campo social con todos los movimientos sociales, un proceso permanente de carácter democrático, de debate de ideas", acotó.
Esta sería la quinta ronda de las conversaciones entre el Gobierno y la oposición que se iniciaron en mayo con la mediación de Noruega.
Los dos primeros encuentros se llevaron a cabo en Oslo y los últimos tres en la isla caribeña de Barbados.
La cancillería de Noruega sostuvo en un comunicado el 18 de julio que los diálogos continuaban y pidió a las partes máxima precaución en las declaraciones sobre lo conversado.
Por el bien de las negociaciones es importante dar a las partes el espacio necesario para avanzar en un "ambiente constructivo y que la confidencialidad del proceso sea respetada por todos", indicaron los noruegos en ese comunicado.
Estos contactos suponen el primer acercamiento entre representantes del Gobierno y la oposición desde la más reciente crisis política, que se desató en enero tras la juramentación de Maduro para el período 2019-2025.