"El día de ayer (miércoles 10 de julio) el Presidente Nayib Bukele anunció la estrategia de financiamiento del Plan Control Territorial, y en ese sentido venimos a informar a la Comisión de Hacienda y Presupuesto la propuesta para el financiamiento", publicó Fuentes en su cuenta de la red social Twitter.
Ministro @Nelfuent: "El día de ayer el Presidente @nayibbukele anunció la estrategia de financiamiento del #PlanControlTerritorial y en ese sentido nosotros venimos a informar a la #CHaciendaAL la propuesta para el financiamiento", en la @AsambleaSV pic.twitter.com/qFrjf5P7qK
— Ministerio de Hacienda (@Hacienda_SV) July 11, 2019
Fuentes, único ministro que continuó en el cargo tras la toma de posesión de Bukele el pasado 1 de junio, agregó que "El Salvador camina hacia una nueva oportunidad" con la actual política para reducir la criminalidad.
El titular de Hacienda aseguró que el Gobierno ya cuenta con aproximadamente el 65% de los recursos, pero necesita un préstamo de 200 millones de dólares del Banco Centroamericano de Intergración Económica (BCIE), más otros 10.4 millones provenientes de créditos para la inversión incluidos en el presupuesto de 2019.
"Para la fase dos del ejercicio 2019 tenemos 67 millones de dólares ya disponibles, más los 91 millones que ha solicitando el presidente", precisó Fuentes.
El nuevo reacomodo presupuestario destinaría 30 millones de dólares a educación y capacitación de jóvenes, 20 millones a obras públicas en comunidades precarias, 10 millones a proyectos de agua potable, cinco millones al Instituto de Deportes de El Salvador, 14 millones a bibliotecas, dos millones en operatividad, cuatro millones en Cultura, un millón en campaña de concientización de jóvenes, dos millones en 4 "Skate parks" y tres millones en jornadas de salud.
El Parlamento ya aprobó la semana pasada una reasignación de 31 millones de dólares para reforzar la alimentación de los soldados y policías movilizados en el plan Control Territorial, dirigido a anular a las pandillas de este país.
Casi desde el inicio de dicho plan, los 28 centros penales del país están en un estado de emergencia que, de entrada, terminaría el pasado 5 de julio, pero Bukele decidió que permaneciera por tiempo indefinido, a raíz de recientes ataques contra policías y militares.
