"Las embajadas de Dominica (Roseau) y Antigua y Barbuda (Saint John"s) ya se cerraron, y las siguientes están en proceso de cierre: Granada (Saint George), San Cristóbal y Nieves (Basseterre) y San Vicente y las Granadinas (Kingstown)", informó la Cancillería.
Para cerrar las citadas embajadas se tomaron como criterios la baja representación o casi inexistencia de comunidad brasileña, el escaso comercio bilateral, la alta concentración de volumen de trabajo en expedientes administrativos y el costo del mantenimiento de estos centros entre 2008 y 2017.
El Gobierno brasileño quiso resaltar que el cierre de algunos puestos diplomáticos no implica falta de interés en la región, y que los intereses de sus ciudadanos en la zona seguirán siendo resguardados por otras embajadas en el Caribe, que podrán ampliar sus funciones.
