"En el proceso de excarcelación de 50 presos, por decisión unilateral del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional participaron como observadores los delegados del Comité Internacional de la Cruz Roja", dice una nota publicada por la web oficialista 19Digital.
La liberación fue confirmada también por un comunicado de la Cruz Roja.
El comunicado del Gobierno precisa que los detenidos recibieron el beneficio legal de convivencia familiar u otras medidas cautelares, al igual que otros grupos de opositores que salieron de prisión desde marzo a la fecha.
La medida coincide con el reciente anuncio de que la Alianza Cívica se retiraría de la mesa de negociación hasta que fueran liberados los 233 detenidos que cumplen estándares internacionales para ser considerados "presos políticos", como avaló recientemente la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
"Nos alegra que hoy, coincidiendo con el Día de la Madre en Nicaragua, 50 familias están reunidas de nuevo con sus seres queridos", añade el comunicado del CICR.
La organización humanitaria internacional agregó que sus delegados llamarán en los próximos días a las personas que obtuvieron prisión domiciliaria "para dar seguimiento a sus casos y brindarles orientaciones".
El proceso de negociaciones, interrumpido unilateralmente en varias ocasiones por la Alianza Cívica alegando falta de voluntad política del Gobierno, contó con el acompañamiento del Vaticano y de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
Nicaragua vive una crisis política desde mediados de abril de 2018, cuando una reforma al sistema del Seguro Social desató violentas protestas contra la administración del presidente Daniel Ortega, acompañadas por actos que el Gobierno tildó de "terroristas".
Entonces fue convocado un diálogo nacional auspiciado por la Iglesia Católica, que se suspendió dos meses después.
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Las negociaciones se retomaron este año y el Gobierno dijo el 9 de abril que mantenía reuniones informales con los delegados de la Alianza, tras culminar oficialmente el diálogo a principios de mes sin alcanzar consenso en puntos medulares de su agenda.
El nuncio apostólico Waldemar Sommertag y el enviado especial de la OEA, Luis Ángel Rosadilla, actúan como testigos y acompañantes internacionales de las negociaciones.