"Tenemos un cálculo de más de 60 viviendas afectadas, y pueden ser más. No hay heridos graves pero están por confirmarse dos casos de personas desaparecidas", dijo en la noche a reporteros el alcalde de la ciudad, Luis Revilla, horas después del desastre ocurrido al mediodía.
Previamente, la policía había dado cuenta de unas 40 viviendas por el desastre que afectó a unas seis hectáreas de viviendas generalmente precarias construidas sobre lo que hasta hace unas cuatro décadas fue el vertedero de basura de la capital política boliviana.
El deslizamiento de lodo y escombros mezclados con restos de un antiguo vertedero de basura en un extremo del barrio de Sopocachi, a unos 200 metros de la residencia del presidente Evo Morales, se extendió hasta la Avenida Kantutani, principal conexión entre el centro y la residencial zona sur, que quedó interrumpida.
El teleférico urbano suspendió temporalmente la operación de la línea que pasa sobre el lugar del desastre, mientras bomberos, policías, efectivos militares y funcionarios municipales colaboraban en la evacuación de viviendas que corrían también riesgo de derrumbe.
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— La Razón Digital (@LaRazon_Bolivia) 30 апреля 2019 г.
El deslizamiento de tierra en la zona #InmaculadaConcepción baja por la avenida Kantutani, cerca al ingreso a #Obrajes, por lo que se cortó el tráfico vehicular. Fotos: Ronald Romero pic.twitter.com/XSSZNEabug
El comandante local de la policía, Clemente Silva, dijo que la evacuación había comenzado el fin de semana, cuando se detectaron los primeros derrumbes pequeños en la zona.
Esa área albergó hasta hace cuatro décadas un botadero de basura y en la cual se levantaron decenas de casas y hasta la municipalidad habilitó una avenida, pese a estar prohibidas las construcciones.
El ministro de Defensa, Javier Zavaleta, dijo a la prensa local en el lugar del desastre que el presidente Morales ha instruido una atención prioritaria a los pobladores afectados, empezando por instalar albergues temporales.
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"Afortunadamente no hay reportes de personas heridas porque estaba en curso una evacuación", dijo Zavaleta.
Bolivia ha soportado fuertes lluvias en abril, fenómeno poco usual en un mes habitualmente templado y seco entre el verano y el invierno.
