"En Chile residen 1.251.255 extranjeros, de los cuales unos 750.000 han ingresado en los últimos cuatro años", dijo Chadwick al presentar un balance del desarrollo de la reforma migratoria, cuyas primeras medidas se comenzaron a implementar un año atrás.
El ministro explicó que en 2018 se registró el máximo histórico de solicitudes de visas, con 450.242 peticiones, lo que significó un aumento del 48 % con respecto al año anterior.
De hecho, en este país de unos 18 millones de habitantes, la comunidad extranjera más numerosa es la venezolana, con 283.233 personas.
Le sigue la comunidad peruana, con 223.023 personas, la haitiana, con 179.338, y la colombiana, con 146.658 personas, según cifras oficiales.
En la conferencia de prensa también se entregaron detalles sobre el perfil dominante de los inmigrantes: 60% tienen entre 20 y 39 años de edad y 51% son hombres.
Detalles de la reforma
Una de las primeras medidas de la reforma, implementada ante el explosivo aumento de la inmigración venezolana, fue la llamada "visa de responsabilidad democrática", que permite a los ciudadanos venezolanos ingresar como turistas y posteriormente solicitar la residencia definitiva.
Hasta el 31 de diciembre del año pasado se presentaron 92.000 solicitudes de esta visa, y se concedieron unas 20.000.
Mientras, en lo que va de este año ya se entregaron más de 25.000 de estas visas.
Otra medida adoptada el año pasado por el Gobierno fue la "regularización de migrantes", un proceso que benefició a los extranjeros que habían ingresado de manera irregular o que estaban sin permiso.
De este proceso participaron más de 155.000 inmigrantes, y 87% de ellos pudieron regularizar sus papeles, lo que les permite trabajar en Chile, según indicó este 10 de abril el Gobierno.