En un comunicado, la Funai, informó que a partir de este jueves 7 realiza la "expedición de protección y monitoreo de indígenas aislados Korubo del río Coari, en la tierra indígena del Valle del Javari (estado de Amazonas)", y que la acción tiene como objetivo "proporcionar el reencuentro entre parientes y evitar una posible tensión".
Los Korubo de Coari (en que parte de los indígenas continúa viviendo en total aislamiento) reivindican el derecho a la tierra cercana al río Coari y se han enfrentado a los Matis, ya contactados desde los años 70, por lo que entienden como invasiones de territorio.
Desde el año 2014, los enfrentamientos entre las dos comunidades indígenas provocaron entre diez y 17 muertes, según los informes dela Funai.
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Las dos etnias vienen enfrentándose desde la década de 1920, pero desde julio de 2018 la Funai detectó un aumento de la tensión por un posible nuevo encuentro, con la aproximación de menos de un kilómetro entre los Korubo y los Matis de la aldea Todowak.
Es la región con más concentración de registros de pueblos aislados, con diez referencias confirmadas y tres en estudio.
Desde 1987, después de décadas de encuentros que dieron como resultados conflictos y epidemias entre indígenas aislados, la Funai cambió su política y pasó a evitar contactar a estas comunidades.
Por la normativa actual, este órgano gubernamental sólo puede buscar el contacto con estos grupos si corren graves riesgos o por iniciativa de los propios indígenas.
Según la Funai, es la primera vez en los últimos 23 años en que el Gobierno brasileño organiza una misión de este porte, que puede ocasionar el contacto fortuito con otros pueblos no contactados hasta la fecha.