En declaraciones al diario Estado de Sao Paulo aseguró que la investigación se hará "en base a casos concretos y no estará subordinada a cuestiones diplomáticas o a cuestiones relacionadas con las posturas políticas de Brasil".
Moro, presente en el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza), remarcó que se tratará del caso como una "cuestión de Justicia" evitando su politización.
La semana pasada, el ministro se reunió en Brasilia con opositores al Gobierno de Nicolás Maduro y con representantes de la Organización de Estados Americanos (OEA).
El presidente del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela en el exilio, Miguel Ángel Martín, y el asesor de la OEA Gustavo Cinose dijeron que pidieron al ministro la adopción de medidas de cooperación previstas en la Convención de Palermo, un tratado de combate a las transacciones financieras relacionadas con el crimen.
Los opositores venezolanos confían en que Brasil se una a EEUU y congele recursos de la cúpula chavista, ayudando así a asfixiar el Gobierno de Maduro.
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El 21 de enero, nada más llegar a Davos, el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, expresó su confianza en que el Gobierno de Venezuela cambie rápidamente.
