Más tarde, los medios brasileños informaron que la cancillería de Brasil retiró las invitaciones que había extendido originalmente a los presidentes Nicolás Maduro y Miguel Díaz-Canel.
Fuentes de la Cancillería confirmaron esta versión de los hechos al diario local O Globo, a pesar de que Bolsonaro afirmó que jamás se invitó a los presidentes de Venezuela y Cuba, alegando que él y su equipo respetan la democracia.
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El presidente electo dijo el 16 de diciembre a través de la red social Twitter, que "naturalmente, regímenes que violan las libertades de sus pueblos y actúan abiertamente contra el futuro Gobierno de Brasil por afinidad ideológica con el grupo derrotado en las elecciones no estarán en la toma de posesión presidencial en 2019".
Naturalmente, regimes que violam as liberdades de seus povos e atuam abertamente contra o futuro governo do Brasil por afinidade ideológica com o grupo derrotado nas eleições, não estarão na posse presidencial em 2019. Defendemos e respeitamos verdadeiramente a democracia.
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) 16 декабря 2018 г.
Según el Ministerio de Relaciones Exteriores, la recomendación inicial del equipo del líder ultraderechista Bolsonaro fue invitar a todos los jefes de Estado y de Gobierno con quien Brasil tiene relaciones diplomáticas, lo que fue realizado.
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Después, sin embargo, el ministerio de Relaciones Exteriores recibió la orientación de excluir a Cuba y a Venezuela de la lista, lo que obligó a contactar de nuevo con los gobiernos de estos países para retirar la invitación.
