"Vamos invertir 90.000 millones de pesos [unos 4.500 millones de dólares] para los primeros ocho estados y una inversión adicional de 25.000 millones de pesos [1.250 millones de dólares] de pesos", informó López Obrador en una conferencia de prensa sobre el presupuesto federal 2019.
Con esos recursos, la seguridad social, el seguro de trabajadores del Estado, entre otras instituciones, dispondrán de más fondos, así como la inversión en ciencia, innovación, investigación científica y tecnológica "vinculada a las necesidades de la gente", prosiguió.
El sistema básico de salud estará disponible para quienes no tienen seguridad social en ninguna de las instituciones del Estado.
"Los recursos que reciben los estados para salud se van a federalizar, para integrar todo el sistema de salud", y para centralizar ese sector será necesario cambiar las leyes mediante una reforma del Artículo 4 de la Constitución y emitir nuevas leyes secundarias en el Poder Legislativo, según el mandatario.
Sin embargo, el plan será lanzado con un convenio del Gobierno federal con ocho estados.
"Es parte del reordenamiento del presupuesto", que recorta gasto suntuarios y sueldos elevados, explicó el mandatario.
En el presupuesto del año próximo, elaborado con criterio de austeridad, fue suprimido "todo lo que no es básico, prioritario e indispensable, sin lo superfluo que se usaba para otros fines", indicó.
Cada seis meses serán incorporados ocho estados a los servicios de salud, comenzando con los estados donde el sector es más precario.
"Este año [2019], el fondo es para 16 estados, el año próximo otros 16, de manera que en dos años tendremos un nuevo sistema de salud pública completo", resumió.
La base de la decisión de López Obrador surgió en una consulta ciudadana, celebrada antes de su investidura el 1 de diciembre pasado.
La meta es ofrecer salud y bienestar a todas las personas; "bienestar es la palabra distintiva del nuevo Gobierno, que como su nombre lo indica es estar bien", puntualizó.
En cuanto al actual seguro popular, "que no es seguro ni es popular", implementado desde hace 18 años, será sustituido por un sistema de salud pública que garantice atención medica de calidad y medicamentos gratuitos, terminó.
Cero corrupción
En el ejercicio de ese Fondo de Salud, la consigna es "cero corrupción y cero impunidad", problemas de los sistemas anteriores del sector, observó.
Actualmente, en los centros de salud y hospitales del país "no hay disponibles los medicamentos", ni siquiera para el llamado "cuadro básico", sostuvo el presidente.
Además, algunas medicinas que se requieren para enfermedades graves no están incluidas en el cuadro básico.
"El objetivo es que no exista más un cuadro básico, y todos los medicamentos se van a proporcionar sin importar la enfermedad; algunos son muy caros, pero se van a adquirir", anunció.
López Obrador consideró que el presupuesto es suficiente "porque ya no habrá corrupción de los que antes hacían su agosto", hasta los políticos que vendían medicamentos muy caros por tráfico de influencias.
"Hoy nuestro secretario de Salud, Jorge Alcocer, es incorruptible, es Premio Nacional de Ciencia y va a estar pendiente la Secretaria Federal de la Función Pública en todas las adquisiciones", que solicitará la intervención de la oficina de transparencia de las Naciones Unidas para las compras consolidadas de medicamentos y equipos, adelantó el presidente.
La prioridad en la atención serán las personas que no tienen seguridad social y los que solo tienen seguridad social temporal, quienes "tendrán siempre seguridad social buena y gratuita", dijo López Obrador.