Asimismo, denunció que hay una maniobra de exfuncionarios para intentar apartarlo del expediente.
El magistrado pidió que se indague sobre lo que afirmó hace unos días el dueño de la revista de noticias Perfil, Jorge Fontevecchia.
"Tengo testimonios de empresarios que dicen que cuando empiezan a hablar les dice 'pare, pare, pare', y que en realidad el único objetivo es que Cristina vaya presa pero nadie más", aseguró este periodista en una entrevista con su colega Carlos Pagni.
El juez también fue cuestionado en los últimos días tras publicarse una foto en la que aparece con el empresario Sebastián Ezkenazi.
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"A modo de coro (las palabras de Fontevecchia) coinciden entre otros con las del periodista Horacio Verbitsky, quien en su página el 7 de octubre pasado publicó un artículo que bajo el título 'Moneda falsa' publica y editorializa sobre una foto en la que el suscripto aparece en una mesa con el empresario Sebastián Ezkenazi".
El juez hizo mención a otras publicaciones que "abonan el intento de funcionarios o dirigentes de la administración de Cristina Elisabet Fernández cuando buscan apartar al suscripto de la instrucción de la presente causa".
El magistrado pidió por tanto que otro juez investigue lo que dijo el dueño de Perfil y así se aclare si existen anomalías en la causa que instruye.
Bonadío esperará a que un tribunal de segunda instancia confirme los cargos contra la expresidenta para pedir su desafuero parlamentario y así detenerla.
La causa judicial comenzó a partir de las declaraciones de la esposa de Oscar Centeno, chófer de Roberto Baratta, quien era mano derecha del exministro de Planifiación Julio de Vido, que ejerció como secretario de Estado durante los Gobiernos de Néstor Kirchner (2003-2007) y de Cristina Fernández.
A raíz de este suceso, varios empresarios declararon como arrepentidos y reconocieron sobornos para conseguir contratos del Gobierno anterior.
