El avance de 12 centavos para cotizar alrededor de 19,04 pesos por dólar se debe, por un lado, a que "en la sesión overnight se observó un debilitamiento generalizado del dólar estadounidense, luego de avanzar durante las primeras tres sesiones de la semana", explica el reporte.
Ese resultado, está "por debajo de lo esperado por el mercado, lo cual reduce la especulación sobre la posibilidad de que la Reserva Federal (FED, banco central estadounidense) podría subir su tasa de interés a un ritmo más acelerado", pronostican los analistas de la institución.
Sin embargo, la previsión no descarta riesgos que puedan generar un nuevo debilitamiento de la divisa latinoamericana, una de las más líquidas e intercambiadas entre las monedas de las economías emergentes.
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Antes de la sesión, la mayoría de las divisas de economías emergentes sufrieron pérdidas, además de "caídas generalizadas en los mercados de capitales, particularmente en EEUU, y movimientos a la baja en el mercado de materias primas, en donde los precios del petróleo cayeron más de 2%", incluyendo a la mezcla mexicana de crudos.
La explicación del nerviosismo
Son tres los motivos principales que explican este nerviosismo en los mercados financieros, comenzando por las consecuencias de la guerra comercial desatada por medidas proteccionistas impulsada por el presidente de EEUU, Donald Trump.
"Se teme que la guerra comercial entre EEUU y China tenga implicaciones severas para el crecimiento económico global", indica la estimación de Banco Base.
Esa reducción de las expectativas del organismo se debe a un menor dinamismo para las economías emergentes, como la argentina, la brasileña y la mexicana.
"Al ser proveedoras de materias primas, [las economías emergentes] serán las primeras en verse afectadas por una desaceleración de la producción manufacturera", prevé el banco.
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En segundo lugar, esta semana la tasa de los bonos del Tesoro de EEUU a diez años alcanzó un máximo desde 2011, de 3,26%, que está "relacionado con la publicación de buenos indicadores económicos durante octubre", prosigue el informe.
En tercer lugar, sigue habiendo dudas sobre la estabilidad a largo plazo de varias economías, "en particular Turquía, Italia y Brasil, lo que también ha deteriorado el apetito por riesgo durante los últimos dos meses", menciona el reporte.
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Finalmente, los analistas consideran probable que durante el último trimestre de 2018 sigan surgiendo noticias de esos países que generen nerviosismo entre los inversionistas.
La opinión de algunos expertos de los organismos financieros internacionales también puede contribuir con el nerviosismo del mercado.
Efectivamente, además de recortar las expectativas de crecimiento global al inicio de la semana en curso, el FMI advirtió que "el mercado financiero global está especulativamente sobrevalorado, lo que aumenta el riesgo de que se pueda observar un fuerte ajuste", a la baja.
Pero la tendencia especulativa de los mercados "no ha sido afectado por el proceso de normalización de la tasa de interés de la Reserva Federal [de EEUU]", termina el análisis, sin mencionar la opinión contraria del presidente estadounidense.
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Trump expresó en una declaración contra el banco central estadounidense, insólita para un jefe de la Casa Blanca, que "la FED está cometiendo un error, están demasiado ajustadas [las tasas de interés]; creo que la FED se ha vuelto loca", dijo en un mitin con militantes republicanos, hacia los comicios legislativos del próximo mes.