"Con mucha contundencia uno puede decir [que] como peruano me siento muy avergonzado de que un violador de derechos humanos haya sido presidente de Perú", expresó a la prensa local el congresista del Partido Aprista Peruano (centro-izquierda), Jorge del Castillo, aludiendo a las conclusiones a las que ha llegado el informe.
Por su parte, el congresista Héctor Becerril de Fuerza Popular (derecha), presidente de la Comisión Madre Mía, sostuvo que por la tarde se elevará el informe a la Oficialía Mayor del Parlamento para que se debata en el pleno.
Becerril no especificó la fecha en que se dará dicho debate.
El congresista Del Castillo aclaró que el caso que involucra a Ollanta Humala con ejecuciones y torturas "no es cosa juzgada", por lo que la justicia peruana podría reabrirlo para que el expresidente responda por los crímenes que se le atribuyen.
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Como capitán del Ejército de Perú, el exmandatario habría ordenado torturar y asesinar a civiles inocentes bajo la presunción de que pertenecían a organizaciones terroristas.
La base Madre Mía se estableció como parte de la lucha contra el terrorismo, representado por el grupo, Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru.
Esta lucha se desarrolló durante el Gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000).