"Recuerden que cada vez que escuchamos tiros, la vida de alguien puede haber cambiado para siempre; me entristeció escuchar eso", dijo el jefe del Pentágono, que aseguró que cuando escuchó el tiroteo en su habitación se limitó a "mantener el protocolo" de seguridad, publicó el diario local O Globo.
Las dos favelas están situadas a escasos metros de la famosa playa de Copacabana, muy cerca del hotel donde se hospedaba la comitiva estadounidense.
Mattis recordó que este tipo de situación, desgraciadamente, es común en muchas ciudades del mundo, incluso en EEUU.
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Afirmó que está trabajando con las autoridades brasileñas para aumentar la cooperación en el área de inteligencia, lo que podría usarse para combatir a grupos de narcotraficantes.
El 13 de agosto se reunió en Brasilia con el ministro de Defensa, Joaquim Silva e Luna; el de Relaciones Exteriores, Aloysio Nunes.
Mattis continuará su viaje ahora por Argentina, Chile y Colombia.
