"La Asamblea en esta legislatura no va a tratar el pedido de autorización para el enjuiciamiento del señor Carlos Mesa porque hay una lista de espera de otros 13 juicios que tendrán que ser tratados en primer lugar este año y el siguiente", dijo García, quien preside el órgano legislativo, en conferencia de prensa.
"Que quede muy claro, a partir de este momento el señor Carlos Mesa no puede seguir utilizando como pretexto el juicio de responsabilidades para hacer campaña política, es un acto inmoral que derrumba su credibilidad", dijo el vicepresidente.
El juicio contra el expresidente, por daño económico y violación constitucional en la expulsión de la minera chilena Quiborax, fue planteado en mayo por la Procuraduría, luego de que un tribunal internacional obligara al Estado boliviano a pagar a dicha firma un resarcimiento de 42,6 millones de dólares.
El requerimiento de la Procuraduría fue avalado luego por la Fiscalía y aprobado el miércoles por el Tribunal Supremo, que decidió pedir la autorización correspondiente a la Asamblea.
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Mesa, renuente a confirmar públicamente si será candidato como pregonan sus seguidores, denunció el mismo miércoles que la justicia estaba "podrida" y al servicio del Gobierno, se declaró "perseguido político" y dijo que pedirá audiencia a la Asamblea cuando ésta vote la autorización del juicio.
Insistió, ante consultas de los reporteros: "Una vez que estamos decidiendo que la Asamblea no va a tratar su tema, por lo tanto no va a afectar su candidatura, él puede ser candidato, que sea candidato pero que lo diga de frente, que no utilice el juicio para victimizarse o para figurar".
Añadió que el Gobierno de Morales, que ya dura más de 12 años, espera competir electoralmente en 2019 con una oposición que haga propuestas de desarrollo en vez de insultos y mentiras.
"El pueblo quiere comparar propuestas, y ahora la única propuesta es la del Gobierno, clarísima en términos de bienestar para los bolivianos, estabilidad, industrialización, oportunidades para la juventud, y una derecha que se dedica a insultar, victimizarse", afirmó.
El expresidente ha optado en cambio por alinearse con el rechazo de la oposición a la nueva repostulación de Morales, que fue autorizada por el Tribunal Constitucional en 2017 pese al voto contrario de un referendo de reforma constitucional un año antes.
Morales ganó sucesivamente las elecciones de 2005, 2009 y 2014, en todos los casos con más de la mayoría absoluta de votos.